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2026-capitulo-6

La cita transcurrió sin más contratiempos. Después de comer, fuimos a la tienda de ropa e hicimos un desfile de modas entre nosotras, y luego fuimos a la tienda general y hablamos de lo lindas que eran las cosas en sus vitrinas.

Pero en realidad no éramos una pareja, así que no había manera de que tuviéramos una atmósfera tranquila. Nos tomamos de la mano, sintiéndome algo incómoda y con un leve hormigueo.

Puede que seamos como imanes que se repelen entre sí. Cuanto más te acercas, más te rechaza y el retroceso te aleja más.

Por eso probablemente no deberíamos acercarnos demasiado, pero por despecho y hostilidad, nos obligamos a acercarnos todo el tiempo.

Una sola vez sería suficiente. Quiero ganarle, aunque sea sólo una vez. Estoy con ella solo para conseguir derrotarla.

Pero ella ni siquiera está interesada en mí como enemiga, le soy indiferente, así que, si me rindo, probablemente ella iría perdiendo el interés en mí gradualmente.

Eso pensaba, pero después de competir por mi dignidad, me di cuenta de que no era así. Ella me odia más de lo que creo.

“Wakaba, ¿Qué te gustaría hacer si tuvieras un novio?”

Pregunta mientras sostiene mi mano con fuerza. Sé que, si respondo honestamente, me lastimará, pero siento que incluso si miento, se dará cuenta y será peor.

“No lo sé”

“Entonces, empieza a pensarlo”.

Dejé escapar un pequeño suspiro. Trate de pensar en un novio ideal. Lo que me gustaría hacer si tuviera un novio así. Debí de haber pensado en eso alguna vez, pero mientras estaba con Komaki, esos recuerdos se volvían borrosos y se desvanecían, y ahora no podía distinguir nada.

“¿Una fiesta de pijamas o algo así?”

“Mmm.”

Aunque yo misma le di mi respuesta en forma de pregunta, ella no parecía interesada.

¿Qué demonios?

Estoy segura de que solo me está preguntando sobre esto para luego quitarme algo importante para mí.

“No puedo dormir bien si me cambian la almohada”.

“Lo sé. Cuando estaba en la escuela primaria y secundaria, solías gritar en los viajes escolares”.

“No gritaba… ¿Recuerdas cómo me quedaba dormida?”

Sería fácil decirle que no lo recordaba, pero no tiene sentido mentir.

“Me convertí en una almohada”.

El viaje escolar que hice cuando estaba en tercer año de secundaria fue el peor. Komaki y yo ya teníamos un fuerte rencor entre nosotras, pero en un abrir y cerrar de ojos, terminamos en el mismo equipo y en la misma habitación.

Luego, preocupada, dijo que no podía poder dormir bien.

Recuerdo que no tuve más remedio que ser usada como almohada dejándome abrazar. Aunque no me agrada, cuando pone ese tipo de cara, no podía negarme.

También soy una idiota por recordar eso.

“Sí. Estoy deseando que volvamos a hacer eso”.

Siento que el contexto con el que lo dice es extraño. Sin embargo, sería un problema si una serpiente se asomara entre los arbustos de nuestros recuerdos y saliera. Así que terminemos esta historia aquí.

Mientras caminamos de la mano, finalmente llegamos al borde del centro comercial. No hay personas en ese pasillo que no conecta ni con el estacionamiento, ni con la entrada principal. Es como si este fuera un mundo diferente.

Me detuve en seco. Y junto conmigo, Komaki también se detuvo.

Su rostro se volvió hacia mí, así que la miré. Puedo ver sus labios, que todavía estaban rojos. ¿Qué se siente al besar a alguien que odias?

Ella siempre roba mis labios, pero me pregunto cómo se sentirá ella cuando hace eso.

Si tú objetivo es acosar a alguien que no te agrada, creo que mínimo, deberías hacer que parezca que te estás divirtiendo.

Cuando ella me besa, siempre tiene una expresión en blanco y, a veces, parece que está nerviosa. Probablemente sea una ilusión, pero si estás feliz de quitarme algo importante para mí, y de verdad me odias, simplemente deberías sonreír.

¿Cómo fue cuando nos besamos por primera vez? Esa fue la primera y última vez que lo hice por “propia voluntad”.

No puedo ofrecer mis labios a alguien que odio con el fin de provocarlo.

Pero si la beso por mi propia voluntad, tal vez pueda entender algo.

“Umezono. Tus cordones están desatados. Eres demasiado vaga. Átalos rápido, ya, ya”.

“No te pases”.

Al escuchar mis palabras, Komaki se inclina un poco. En respuesta, la tomó de sus mejillas entre mis manos y la besó suavemente.

No soy una persona traviesa como Komaki, así que no meteré mi lengua ahí. La bese varias veces, haciendo unos sonidos extraños con los labios.

No es nada divertido.

Debería haberse limpiado la boca después de comer, pero aún podía saborear el helado. Sentí como si la acumulación de las comidas de hoy se reflejara en mis labios.

El sabor es diferente al habitual, la temperatura es un poco más alta de lo habitual y sus labios se sienten un poco duros. Si no estaba preparada, probablemente se puso muy rígida de golpe por la sorpresa. Estaba un poco emocionada de ver un lado de Komaki que no conocía.

Komaki puede parecer perfecta, pero no lo es. Me considero una persona perfecta.

“desagradable”

No pude evitar reírme cuando mis palabras sonaron tan vacías.

“Tu… hipopótamo.”

“No hay hipopótamos. Esto no es un zoológico”. (ndt: creo que quería decir idiota, pero se trabó y le salió hipopótamo en japonés, ya saben, juego de palabras y kanjis)

Ríete, ríete.

El sonido de mi propia risa resuena extrañamente en mi cabeza.

¿Quizás estás molesta porque tú no lo hiciste?

No, es solo porque eres mala.

“Supongo que ahora entiendes un poco como me siento todo el tiempo, ¿Verdad?”

Komaki se lleva la mano a los labios, luciendo atónita. No esperaba una reacción tan sincera y confusa, así que fue un poco sorprendente.

Después de todo, no es divertido.

Ver a Komaki aturdida no me hizo sentir mejor, y pateé el suelo, sintiendo que estaba perdiendo de vista algo aún más importante.

“Terminar la cita con un beso. Esa podría ser una de las cosas que querría hacer si tuviera un novio”.

Me alejo de ella. Mi voz se eleva un poco.

“Así que dejemos nuestra cita hasta aquí, Umezono.”

Unos treinta segundos después, Komaki finalmente comenzó a moverse.